En este blog hemos hablado cientos de veces sobre temas relacionados con el diseño gráfico y la identidad de marca: Desde cómo hacer manuales de identidad corporativa, hasta cuándo es necesario hacer un rebranding. Sin embargo, hoy va a entrar en juego un nuevo concepto que queremos que conozcáis: El restyling.
Seguro que algunos de vosotros habéis escuchado hablar de él en alguna ocasión. O quizá penséis que es lo mismo que el rebranding, pero no es así. En el artículo de hoy os vamos a hablar un poco más a fondo sobre el restyling: Qué es, qué diferencias tiene con el rebranding de marca y cómo podéis llevarlo a cabo.
¡Empecemos!
Antes de entrar en materia y explicaros a fondo las diferencias entre el restyling y el rebranding, es importante que pongamos sobre la mesa qué son ambas cosas.
En primer lugar, el restyling es la modificación de la identidad visual de una marca. Quizá os hayáis dado cuenta de que, cada cierto tiempo, todas las marcas hacen pequeñas modificaciones en sus logos, packaging, paleta cromática, merchandising… En general, en todos aquellos aspectos que puedan englobar la identidad visual.
Un ejemplo súper claro de esto es el cambio que llevó a cabo Google durante el año 2015. Como podéis ver en las imágenes de la parte inferior, únicamente modificó la tipografía de su logo, manteniendo los colores y la estética de la marca en general.
Y es que es justamente esto de lo que se trata el restyling: Hacer cambios en la identidad visual de la marca sin modificar los valores, misión o visión de la misma. Otro ejemplo bastante común, pero del que quizá poca gente se percatase, fue la modificación de tipografía del logo de Jazztel. Os incluimos imágenes a continuación:
Otro más. ¿Cuántos de vosotros recordáis el icono viejo de la plataforma en la que se postean vídeos y fotos? En 2016 se llevó a cabo un restyling de Instagram muy notorio: modificaron su logo, pasando de uno bastante retro a uno más colorido y actualizado.
Como habéis podido observar, estamos constantemente expuestos al restyling de las marcas, sin embargo, no somos conscientes de que, más allá que un simple cambio de logo, es un cambio de imagen.
Es muy posible que os preguntéis por qué se lleva a cabo esta transformación de marca en lo que a la identidad visual se refiere. Y la respuesta a esto es muy simple. Nos encontramos en una sociedad que está constantemente en movimiento: No para de evolucionar. Ya sea de una manera o de otra, las marcas y empresas se ven inmersas en cambios constantes a los que deben ir adaptándose si no quieren quedarse atrás. Por esto, y con el objetivo de adecuarse a lo que el público les exige, las empresas modifican su identidad visual cada cierto tiempo.
Aunque es recomendable que, periódicamente, revisemos nuestra identidad visual, hay algunas razones por las cuales una marca debería llevar a cabo un cambio de imagen. Los motivos más comunes para modificarla suelen ser los siguientes:
Debemos pensar en el restyling como una puesta a punto de la marca para actualizarla y adaptarla a los nuevos tiempos. Como cuando limpiamos el coche porque así parece más nuevo y bonito.
En Caronte Web Studio somos expertos en diseño gráfico. Si consideras que tu marca se encuentra en alguna de las situaciones mencionadas anteriormente, no dudes en ponerte en contacto con nosotros: Le daremos una vuelta completa a tu identidad visual para que se adapte a las nuevas necesidades.
Como hemos mencionado anteriormente, el restyling es la modificación de elementos de la identidad visual de una marca con el objetivo de actualizar la imagen de la misma. El rebranding, sin embargo, es la modificación completa de la identidad de una empresa o marca. Es decir, la modificación de valores, misión y visión de la marca y, como consecuencia, la realización de un restyling para adaptar la imagen visual a este nuevo enfoque.
Podríamos decir que el cambio de imagen es una pequeña parte del rebranding: Si hacemos un rebranding, tendremos que hacer sí o sí un restyling. Sin embargo, si hacemos un restyling no tendremos que por qué hacer un rebranding. En la imagen expuesta a continuación ilustramos esta idea para que quede lo más clara posible.
Los cambios de imagen son más comunes de lo que pensamos y, aunque no lo parezca, nos rodeamos de ellos constantemente. A continuación os vamos a presentar algunos elementos que, normalmente, suelen modificarse al hacer un restyling:
Tal y como habéis visto, el restyling es una acción totalmente diferente al rebranding y, por ende, debemos escoger con mucho cuidado cuál de las dos opciones es la más adecuada para nuestro caso.
Si sentimos que nuestra identidad visual está anticuada, o que ya no refleja bien nuestros valores de marca, optaremos por un restyling. Sin embargo, si lo que vamos a modificar es el rumbo y los valores de la compañía, deberemos optar por un rebranding completo, no vale solo con un cambio de imagen.
¿Se te viene a la mente algún otro rebranding que hayas visto y no hayas sabido identificar hasta ahora? Te leemos en comentarios.
¡Hasta la próxima!
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