Seguramente estés leyendo este artículo porque tienes un proyecto web en el que sabes que no todo lo que se muestra de tu web en Google debería estar ahí. Bien sea porque se trata de un contenido no relevante para tus usuarios, por páginas rotas o internas o por otros motivos. Y te estarás preguntando cómo desindexar una URL de Google de forma sencilla para evitar que esto afecte de forma negativa al SEO de tu web.
Y es que, como hemos comentado antes, no todas las páginas de tu web deberían de aparecer en Google. Es más, todas aquellas páginas que «sobran» en las búsquedas pueden hacer que el posicionamiento orgánico de tu web se vea perjudicado.
Por eso, en este artículo no solo te explicaremos algunas formas para conseguir quitar una página de la SERP, sino que también te contamos los motivos y las causas más comunes por las que se debe hacer. ¡Sigue leyendo!
La indexación de una página se refiere a que una URL aparezca en los resultados de búsqueda cuando un usuario realiza una consulta. Este proceso de indexación es el resultado o consecuencia de un proceso anterior que realizan los bots de Google, que es el rastreo. Primeramente, Google realiza una «visita» a tu web y luego, en base a una serie de parámetros que nosotros le podemos indicar, decide qué partes de tu web «recomienda» a los usuarios a través de las búsquedas.
Por tanto, al igual que nosotros podemos indicarle qué partes de nuestra web queremos que Google «recomiende» también podemos indicarle cuáles son aquellas partes que no nos gustaría para nada que Google las añada en las búsquedas. Aquí tienes algunos de los principales motivos por los que no sería conveniente la indexación de algunas páginas.
Las páginas con un contenido escaso, también llamado thin content o de baja calidad, pueden lastrar el posicionamiento orgánico de tu web. Por eso es recomendable desindexarlas si no son páginas relevantes.
Si, por el contrario, se trata de una página principal, en vez de desindexarlas deberías de reforzar el contenido aprovechando para incluir keywords semánticas que persigan la misma intención de búsqueda que tu keyword principal.
Si tienes dos páginas con el mismo contenido, bien sea por una migración desde un entorno de pruebas que se acaba indexando, o por una ficha de producto actualizada bajo otra URL o cualquier otro motivo, Google estará considerando estas páginas como idénticas y terminará causando confusión a los crawlers o bots de Google.
En este caso es recomendable desindexar una de las dos, preferiblemente la que menor posicionamiento tenga, para evitar caer en una penalización y una bajada de posiciones.
Es muy frecuente encontrar páginas no relevantes indexadas en Google, como las páginas legales de una web o incluso plantilla con textos lorem que hemos olvidado eliminar al crear una web con un CMS como WordPress. Incluso podemos encontrar en Google la típica entrada de prueba de Hello World! de una web.
Estas páginas, aparte de crear una imagen no muy buena de una web en las SERP o ser irrelevantes para los usuarios, también pueden hacer que nuestro amigo Google no nos vea con buenos ojos. Piensa que, en los últimos años, Google está obsesionado con mostrar a sus usuarios contenido de calidad en las búsquedas. Así que debes asegurarte de dárselo a tus usuarios orgánicos.
Otra de las causas más comunes es encontrar páginas internas que no deberían ver los usuarios, salvo cuando realizan una acción dentro de tu web. Hablamos, por ejemplo, de páginas de gracias que debería aparecer cuando un usuario envía un formulario o páginas de inicio de sesión, mis pedidos o carrito de compra si se trata de un ecommerce.
Estas páginas no conviene que estén indexadas porque no aportan un valor en las búsquedas orgánicas. Se trata de páginas que deben estar ocultas a no ser que el usuario realice una acción como iniciar sesión, hacer una compra o suscribirse a una newsletter.
Puede ocurrir que existan dos páginas que estén posicionando por la misma keyword principal y persigan la misma intención de búsqueda. A esto se le llama canibalización. Hay que tener en cuenta que no todas las canibalizaciones tienen por qué ser malas. Por eso es importante analizar si conviene o no desindexar una de las dos páginas.
Por ejemplo, si tus páginas están posicionando por la misma keyword y están en la primera y la segunda posición entonces sería peor desindexar alguna. Pero si estás en la novena y decima posición conviene desindexar la pero posicionada para que puedas escalar alguna posición. Ten en cuenta que si no lo haces, Google estará repartiendo el posicionamiento entre las dos y perderás oportunidades para esa keyword.
Las páginas rotas generan una mala experiencia de usuario. Pero si están indexadas, además es un mal indicador para Google. En este caso, lo correcto es redireccionar la página rota hacia una categoría padre para evitar una fuga de usuarios y que, por tanto, aumente la tasa de rebote. Y solicitar a Google que vuelva a rastrear la página para que termine reindexándola.
Si se trata de una redirección hacia otra página, entonces acabará siendo desindexada automáticamente por Google cuando vuelva a rastrearla.
En ocasiones puede que tengamos páginas con un contenido que ya se ha quedado obsoleto o es antiguo. Quizá no nos interese que este contenido aparezca en las búsquedas porque se trata de servicios o productos que ya no ofrecemos.
En este caso conviene retirarlos para evitar crear una confusión al usuario y a la larga una mala experiencia de tus potenciales clientes.
Si quieres saber cuáles son las páginas que está indexando Google actualmente de tu web, es tan sencillo como preguntarle directamente a Google. La forma de preguntarle es a través del siguiente comando:
Cuando realices esta búsqueda le estarás diciendo a Google que te traiga todos los resultados que recoge de las páginas del dominio que le has indicado.
Lo primero que debes hacer es solicitar a Google que desindexe una URL que ya no quieres que aparezca en los resultados de búsqueda. Esto se hace a través de la herramienta Search Console.
Una vez accedemos a nuestra cuenta de Search Console podremos ver que en la barra lateral izquierda aparece la opción “Retirada de URLs” que debemos seleccionar. En la siguiente pantalla aparece en la parte derecha un botón rojo que pone “Nueva solicitud” donde debemos pinchar.
Desde la ventana modal que se despliega debemos indicar la URL que queremos desindexar. Desde ahí también podremos elegir si queremos retirar sólo una URL concreta o todas las que cuelgan de la URL. De esta forma con una única solicitud podremos indicar varias URL que no queremos que se sigan indexando. Acto seguido en cuanto pinchemos en “siguiente” ya estará realizada la solicitud.
Debes tener en cuenta que esta retirada de URL es temporal. Por lo que pasados unos 6 meses Google puede volver a indexar la página en el siguiente rastreo si no se han tomado medidas para prohibir su indexación. Esto nos lleva al siguiente paso que es declarar la página como no indexable para los motores de búsqueda.
Este paso es necesario si no queremos que se vuelva a indexar la URL tras el periodo de retirada temporal, como comentamos antes. Para declarar una página como no indexable debermos hacerlo de la siguiente forma:
A través de la directiva “no-index” que se declara en una metaetiqueta en el <head> de la página. De la siguiente manera:
<meta name='robots' content='noindex, follow' />Si lo tuyo no es tocar el código, puedes hacerlo mediante plugins como Yoast SEO que te permite modificar la directiva en cada una de las páginas de tu web de una forma muy sencilla.
Si lo que quieres es desindexar una URL porque el contenido es obsoleto o va a desaparecer de tu sitio web, entonces esta será la mejor manera. Un ejemplo muy común en un ecommerce es la retirada definitiva de productos del catálogo. En este caso, la redirección 301 hará que con el tiempo la página redireccionada acabe siendo retirada de la SERP.
Redirect 301 /pagina-que-no-quiero-redireccionar/ http://carontestudio.com/pagina-de-destinoSi no sabes cómo realizar un redireccionamiento mediante código no te preocupes que para eso te dejamos el enlace a un artículo en donde te explicamos cómo hacerlo de forma correcta desde el htaccess y a través de plugins
Como puedes ver, la desindexación de una URL de Google es un proceso sencillo pero que es necesario llevarlo a cabo de forma correcta para evitar que la página vuelva a ser indexada en rastreos futuros. No hace falta saber programar para llevar a cabo este procedimiento, te puedes apoyar en plugins si tu web está hecha en WordPress. Incluso si declaras una página como no indexable con alguno de los métodos explicados puedes ahorrarte el paso de solicitar la retirada en Search Console, ya que Google la terminará retirando de la SERP.
Si no tienes claro qué páginas son las que debes tener indexadas y cuáles no, entonces te recomendamos que contactes con nosotros para poderte asesorar y ayudar. Somos especialistas en posicionamiento orgánico en Vitoria.
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