Si bien es cierto que László Moholy-Nagy se granjeó su fama como fotógrafo más que como diseñador, el artista húngaro cuenta con experiencia en el mundo de las artes gráficas. Sin embargo, su mayor aportación al mundo del diseño fue sin duda la influencia que ejerció sobre muchos de los más talentosos diseñadores. Por eso, hoy ahondamos en la figura de László Moholy-Nagy, un símbolo de la Bauhaus.
Cuando hablamos de László Moholy-Nagy, hablamos de algo más que un simple artista de su época. Fue sin duda alguna, un referente para muchos de sus alumnos en la archi conocida escuela de arte, Bauhaus. Conozcamos más a fondo al artista húngaro.
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László Moholy-Nagy nació un 20 de julio de 1895 en Bácsborsard, Hungría, donde pasó su niñez. Comenzó los estudios de derecho hasta alistarse en el ejército para combatir en la Primera Guerra Mundial, donde caería herido. Fue entonces cuando experimentaría sus primeras incursiones en el mundo del arte, gracias a trabajos realizados en tinta china, pintura y tiza.
En 1920, al concluir la guerra, Moholy-Nagy se mudó a Alemania, donde conoció a la fotógrafa Lucía Schulz, con la que acabaría contrayendo matrimonio. Con ella profundizó en el mundo de la fotografía artística y experimental, y juntos llevaron a cabo fotogramas de un estilo único y personal que los catapultarían a la fama.
En 1923 la escuela de arte y diseño alemana, Bauhaus de Weimar, lo escogió como profesor del «taller de trabajos de Metal». En la Bauhaus logró hacerse con el puesto de director general, acompañando a la escuela en su traslado a Dessau en 1925. Durante este periodo compaginó la docencia y la escritura con el diseño de objetos cotidianos y la fotografía.
En 1935, con el estallido de la Alemania nazi, Moholy-Nagy se trasladó a Londres y más tarde a Chicago. Allí ostentó el cargo de director de la New Bauhaus. En 1939 crearía una nueva escuela de manera independiente, la School of Design, con los mismos profesores que en la New Bauhaus, y que en 1944, tras obtener el rango universitario, pasó a llamarse Institute of Design.
Moholy-Nagy se volvió a casar con la historiadora y actríz , Sibyl Pietzsch, don la que tendría dos hijas. El 24 de noviembre de 1946 murió en la ciudad de Chicago, donde también se hallan sus restos.
Moholy-Nagy estableció una relación única entre la fotografía y la pintura en el que constituye el octavo de los libros de la colección Bauhaus. Aún hoy se considera uno de los pilares de la fotografía. En él, Moholy-Nagy defendía que la pintura era un medio para dar forma al color, mientras que la fotografía y la exposición solar podían servir como instrumento de investigación creación artística.
Gracias a sus experimentos con la luz y el tiempo de exposición, Moholy-Nagy logró fusionar la fotografía con toda suerte de géneros artísticos, interesándose especialmente por los fenómenos lumínicos que plasmó con maestría en sus fotogramas y películas.
Un buen ejemplo de su labor fue su experimento con un Modulador luz-espacio. Este invento consistía en una serie de planos metálicos perforados por los que la luz se filtraba. Gracias al uso de un motor que alternaba dichos planos, la proyección de distintos efectos de luces y sombras creaban un efecto único.
La influencia artística de László Moholy-Nagy bebía claramente del cubismo y el movimiento «De Stijl», tan promovido en el cenit de la actividad en la Bauhaus. En sus obras se pueden apreciar elementos geométricos de tintas planas, líneas rectas y diagonales, superposición de planos y demás elementos característicos del movimiento Bauhaus.
También posee un uso tipográfico muy característico del movimiento, en el que hace gala de tipografías de palo seco de distintos tipos o manuscritas. De esta manera, rompía de lleno con la imposición de la tipografía gótica alemana de la época nazi. De hecho, algunas de sus obras poseían un cariz político de protesta social contra la Alemania más conservadora.
Como ya hemos comentado con anterioridad, Moholy-Nagy se especializó en la creación de fotogramas. Así, los principales campos en los que se movía eran la pintura y la fotografía, aunque rodó varios cortos y videos artísticos.
Aunque a menudo fusionaba las disciplinas de pintura y fotografía, Moholy-Nagy también tiene numerosas pinturas y dibujos emblemáticos. Quizá se puedan diferenciar las obras más propias del «De Stijl» y la Bauhaus, con los dibujos y retratos a mano alzada, lleno de trazos y líneas orgánicas.
Como ya hemos dicho anteriormente, Moholy-Nagy llevó a cabo una gran cantidad de sus llamados «fotogramas», en los que experimentó con la iluminación, los tiempos de exposición fotográfica y en ocasiones, la pintura, para lograr efectos artísticos únicos. Así pues, la fotografía y las artes audiovisuales en general, y sobre todo la artística, está en verdadera deuda con el húngaro.
Como director de la Bauhaus, sus obras gozaron de gran difusión, pero sin duda, su influencia sobre un amplio número de alumnos y seguidores, derivaron en la proliferación del uso de la fotografía y la pintura de manera conjunta. El micro-universo fotográfico creado por artistas como Moholy-Nagy y Man Ray fue el caldo de cultivo de la edición fotográfica que conocemos hoy.
Por nuestra parte, no queda sino despedirnos hasta el próximo artículo. Esperamos que hayas disfrutado de la lectura. Si quieres saber más acerca del genio húngaro y sus fotogramas, aquí tienes un enlace a un interesante video.
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